lunes, 27 de agosto de 2018

VIAJANDO GRATIS EN EL SIGLO XXI


Inaudito, cierto, pero ignoro si frecuente por falta de personal, lo que les ocurrió a quienes entre las estaciones de Calamocha y Valencia viajaron en el último tren de ayer domingo 26 de agosto sin pagar al no ser visitados por personal de Renfe para que lo hicieran, y en el final de trayecto salieron en València Nord por puerta abierta quienes ocupaban la mitad de un automotor diésel moderno tipo 599.   

A los quince viajeros de Calamocha se unieron quienes subieron en Santa Eulalia del Campo, Cella, Teruel, Sarrión, Mora de Rubielos, Segorbe y Sagunto. 

Como en Caminreal, estación anterior a Calamocha, se cruzan los trenes y retornan los interventores a sus procedencias de Valencia y Zaragoza, la revisora del tren hacia Zaragoza se encontraría con los viajeros que no pudieron pagar sus billetes desde Sagunto y continuaban viaje.

Viajeros gratamente sorprendidos en estos tiempos que cobran por todo, mayor déficit para el servicio ferroviario, y lo más grave no constar en las estadísticas de utilización de los trenes, ya que ayuda a la supresión de paradas en estaciones por escasa o nula utilización.

Quién sabe si lo hacen para compensar a los usuarios de unos servicios lentos para esta época por muchos años de despreocupación ministerial para modernizar el tramo entre Sagunto y Teruel.

Por problemas técnicos llegó a Calamocha con 16 minutos de retraso que el pundonoroso y profesional maquinista redujo a cinco a pesar de circular a marcha lenta en la mayor parte del trayecto entre Sagunto y Cabanyal por las obras del tercer carril.

Las contradicciones en España, mucho paro y falta de personal para algunos servicios básicos.

Esteban Gonzalo Rogel