martes, 5 de junio de 2012


05-06-2012


TRANVIA A NINGUNA PARTE

Parafraseando un poco el título de la excelente novela de Manuel Vicent, bien podría ser éste el titulo de una obra de ciencia-ficción, pero ciertamente resulta irónico que en muchos casos la realidad supere la ficción y éste es sin duda uno de ellos.

El pasado sábado 26 Mayo, cinco socios de la AVAF tuvimos la osadía de enfrentarnos a una realidad que nos dejó atónitos. La idea era recorrer a pie el tramo en superficie de la inconclusa línea T2 de Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana.

Tras comenzar la marcha en la avenida General Urrutia y dejar atrás enseguida el final del túnel procedente de la avenida Reino de Valencia y calle Alicante y el espacio en parte acotado para la construcción de la estación subterránea de Hermanos Maristas, contemplamos con desolación la vía, huérfana de catenaria y en un terreno yermo en el primer tramo en superficie de unos 200 metros de longitud. Después del primer “paso a nivel” con trafico rodado, desvío a la izquierda por la avenida Antonio Ferrandis en la sección con plataforma ahora utilizada por autobuses urbanos hacia la parada de la Ciudad de las Artes y las Ciencias, donde vimos in situ las grietas producidas en el hormigón impreso sobre todo en la zona entre los carriles.

Segundo paso a nivel en la rotonda con el puente del Assut de l’Or enfrente y después del tercer paso, para cruzar el Camino de las Moreras, seguimos por la vía en situación como al principio o como se suele decir “dejada de la mano de Dios”. Recorrimos unos 500 metros y al llegar al puente, que con fuerte pendiente en los extremos cruza las vías de RENFE, comprobamos que la hasta entonces  árida tierra cambiaba radicalmente de color hacia un bonito tono verde gracias  al ilusorio recurso del césped artificial.

A punto de culminar frente al Mercado Municipal de Nazaret nuestra expedición, vimos el cuádruple desvío-cruzamiento situado también en una rotonda para las futuras maniobras de los convoyes.

Para finalizar, visita nostálgica al antiguo edificio de la estación de Nazaret que dejó de recibir trenes a raíz de las inundaciones de 1957, ya que al quedar parte de la línea Jesús-Nazaret destruida, la C.T.F.V. aprovechó la ocasión para pedir su clausura.

Este edificio que el próximo 15 de agosto cumplirá cien años era copia del que entre 1893 y 1962 fue terminal en Valencia del Ferrocarril a Torrent y Villanueva de Castellón.



Desde esta Asociación nos gustaría dar un toque de atención a nuestra clase política para que se retomaran pronto las obras que tanto dinero público han costado, así como la inmediata rehabilitación del edificio de la estación declarado bien de relevancia local con nivel 2 de protección patrimonial y que por supuesto, nunca más se volvieran a dar situaciones como ésta.



Luis Navarro