Es el título de la exposición que hasta el 15
de junio se podrá visitar en el Salón Noble del Ateneo Mercantil de
Valencia con motivo del cercano centenario, el 8 de agosto, de la céntrica
terminal ferroviaria de la calle Xátiva, que es Monumento Histórico Artístico
desde 1983.
Numerosas fotografías históricas y actuales,
planos originales de proyectos, restos arquitectónicos retirados de
instalaciones que hubo en el vestíbulo del edificio para servicio de viajeros y
una maqueta a escala reducida del entramado de la gran cubierta metálica de 196
metros de longitud, 45 de luz y 22 de altura en la clave, componen una
atractiva muestra que está complementada con un audiovisual.
La Estación del Norte, uno de los tres iconos del
modernismo del siglo veinte en Valencia, es un compendio de diseño, decoración
y proporcionalidad, y, a la vez, un canto y exaltación de Valencia a través de
la temática y los materiales empleados. Es una combinación del Sececionismo
austriaco de principios del siglo XX con los elementos de la más pura tradición
valenciana. Es la obra más importante que proyectó y dirigió Demetrios Ribes
Marco, arquitecto valenciano que trabajó para la compañía de los Caminos de
Hierro del Norte de España, popularmente La Norte, diseñando edificios para la
explotación ferroviaria, aunque también dejó su impronta en construcciones para
otros servicios públicos. La estación Barcelona Vilanova, actualmente terminal
para autobuses, y parte de la de Principe Pío en Madrid son destacados ejemplos
ferroviarios, y la sede de Correos en Castellón de la Plana y viviendas en el
Ensanche de Valencia de su participación en otros ámbitos.
La muestra ha sido organizada por la Cátedra
Demetrio Ribes y ha contado con la colaboración del Ateneo Mercantil, ADIF, la
Fundación de los Ferrocarriles Españoles, el CEDEX-CEHOPU del Ministerio de
Fomento, el Ayuntamiento de València, y de coleccionistas privados, entre ellos
la familia Guillot-Ribes.
Según los organizadores, la exposición es un
recorrido por los diversos aspectos relacionados con la Estación del Norte,
desde el arquitecto que la diseñó en 1906 hasta la vida cotidiana de la terminal
ferroviaria, pasando por sus proyectos, su arquitectura y su ornamentación.
Un edificio de gran valía arquitectónica que ha
llegado a su centenario gracias al aprecio popular y la tenacidad de
importantes entidades y medios de comunicación que consiguieron que no
prosperara el peligro de especulación urbanística de los años setenta del siglo pasado que tanto perjudicó al
patrimonio cultural de pueblos y
ciudades de España.
Esteban Gonzalo Rogel
Esteban Gonzalo Rogel